Las Batuecas - Sierra de Francia | Las Batuecas - Sierra de Francia - Senderismo, pesca y naturaleza

Al sur de la provincia de Salamanca, encontramos este Parque Natural formando parte de las estribaciones occidentales de la Cordillera Central.

Las Batuecas - Sierra de Francia

Las Batuecas - Sierra de Francia


Situado al sur de la provincia de Salamanca y con una extensión de 31.801,91 hectáreas pertenecientes a 15 municipios, el Parque Natural forma parte de las estribaciones occidentales de la Cordillera Central. Sus cotas más altas se sitúan en el Pico Hastiala (1.735 metros) y en la cresta de la Peña de Francia, que con sus 1.723 metros domina el conjunto de la comarca, encontrando la menor altitud en el término municipal de Sotoserrano, a orillas del río Alagón, sobre los 400 metros.


El Parque se establece en la divisoria de dos cuencas hidrográficas, los ríos Alagón, Francia y Batuecas vierten al Tajo, mientras que el Agadón pertenece al Duero. Aunque está situado en la región mediterránea, la diferencia altitudinal existente y la orientación de las laderas determinan la existencia de zonas con clara influencia atlántica, y otras mucho más cálidas de tendencia mediterránea que en conjunto favorecen una gran diversidad faunística y florística, y permiten la producción de cerezas, uvas, aceitunas o castañas.


Pero este singular entorno encierra, además, una gran riqueza cultural y un importante patrimonio histórico-artístico, con cuatro núcleos declarados Conjunto Histórico – Artístico, enclaves con pinturas rupestres, restos de minas romanas o ermitas y monasterios repartidos por todo su territorio.


Entre los parajes más singulares del Parque se pueden citar:

  • El valle de Las Batuecas, de cuya belleza y misterio da testimonio la abundante literatura existente, siendo muy conocida la expresión estar en Las Batuecas, a raíz de las Cartas escritas desde Las Batuecas por el Pobrecito Labrador de Mariano José de Larra.
  • La Peña de Francia, desde donde puede contemplarse el Pico Hastiala, el Pico Mingorro, la Mesa del Francés, los Cabriles, el Campo Charro, la sucesión montañosa de Las Hurdes y las Sierras de Béjar y Gredos.
  • El valle de Belén en Herguijuela de la Sierra.
  • Los meandros del Alagón en Sotoserrano.

El espacio protegido se ubica en la comarca de la Sierra de Francia, separada de la Sierra de Béjar por la gran fosa del río Alagón que, con una anchura de 20 kilómetros, es el único gran portillo del Sistema Central aprovechado por el citado río para capturar aguas de la cuenca del Duero y llevarlas al Tajo.


Climatológicamente, todo el área presenta unas precipitaciones anuales bastante altas, por encima de los 1.000 litros, oscilando entre los 920 de Miranda del Castañar y los 1.800 en las proximidades de La Alberca. Dentro del parque, existen contrastes climáticos importantes; en el entorno de La Alberca, se registran las temperaturas más bajas, con una media anual de 11 ºC y con temperaturas mínimas absolutas inferiores a 0 ºC durante cinco meses al año; el sector sureste, que engloba la zona de Sotoserrano y Herguijuela de la Sierra, posee las temperaturas más cálidas, con una media anual superior a los 14,4 ºC.


Los materiales que se encuentran en los diferentes sustratos del Parque son de origen paleozoico, dominando los metamórficos como pizarras y cuarcitas en el centro y oeste del espacio, y los graníticos en la parte oriental, dispuestos sobre un zócalo granítico muy rígido y cristalino con una estructura interna en bloques originados por un sistema de fallas. Se produce así un relieve de enormes lomas de cimas suaves y laderas muy activas, localizadas en los escarpes de las fallas, y de valles en artesa muy profundos correspondientes a los bloques hundidos. Todo ello explica la presencia de grandes canchales rocosos en las partes altas.


En las cumbres más altas del Parque Natural la vegetación ha tenido que adaptarse a la crudeza del clima, dominando el piorno y el erizón. A menor altitud aparecen los bosques de rebollo -en cuyo sotobosque crecen acebos, serbales y arce menor- y los castaños. En las zonas de robledal más frías, húmedas y orientadas al noroeste encontramos algunos abedulares. Es reseñable la presencia en el territorio de algunos robles de condiciones climáticas más húmedas, como el carballo (Quercus robur) o la famosa Haya de Herguijuela de la Sierra, referida por multitud de autores como una de las más meridionales de la Península Ibérica.


Al sur y descendiendo en altitud, empiezan a aparecer especies típicamente mediterráneas que dan paso a una de las formaciones más emblemáticas de este Espacio, el encinar.


Entre encinas retorcidas encontramos notables ejemplares de alcornoques, tejos, madroños, durillos, lentiscos, enebros y algún almez, confundidos entre la abundante cobertura que proporciona la jara pringosa. Dentro del Parque se encuentran también comunidades higroturbosas típicas del Sistema Central, en las que destacan la carnívora atrapamoscas o los brezales de carroncha. Además aparecen grandes áreas cultivadas de árboles frutales, viñedos y olivares, entre los que destacan por su extensión los cultivos de cerezo, base económica de muchos pueblos de la Sierra.


Como especie exclusiva del Parque Natural cabe destacar la Armeria salmantica, planta que forma pequeñas matas y crece únicamente en el entorno de la Peña de Francia.


Un total de 213 especies de vertebrados están catalogadas en el Parque, de las que 9 corresponden al grupo de los peces, 13 al de anfibios, 19 al de reptiles, 126 al de aves y 46 al de los mamíferos.


En cuanto a las aves es habitual ver volar a los buitres, tanto leonados como negros. También frecuentes son el águila real, halcón peregrino, alimoche y búho real.


Especial mención merece la esquiva cigüeña negra, catalogada en peligro de extinción dado el delicado estado de sus poblaciones en nuestro país. Esta especie suele elegir lugares apartados del hombre para instalar su nido. Es muy asustadiza, por lo que a la menor señal de perturbación huye, abandonando incluso a sus pollos. Hasta épocas recientes también nidificaban aquí el águila imperial y el águila perdicera, los actuales trabajos de mejora de la caza menor que se llevan a cabo en el territorio del Parque pretenden, entre otros objetivos, favorecer su retorno.


Esta región es muy propicia para los anfibios; en los numerosos arroyos y charcas se puede encontrar al tritón ibérico, sapo partero ibérico, rana patilarga y sapillo pintojo, entre otros. Respecto a los reptiles cabe destacar la lagartija de la Peña de Francia, endemismo descrito recientemente exclusivo de estas sierras.


Entre las 46 especies de mamíferos hay que reseñar la cabra montés, reintroducida con gran éxito en la década de los 70, que habitó desde antiguo las cumbres pedregosas de estas sierras. También hay tejón, gato montés, meloncillo, garduña, desmán ibérico y nutria. Corzos, ciervos y jabalíes son otras de las especies habituales.


El Parque presenta una gran riqueza cultural y un importante patrimonio histórico-artístico. El inventario de restos arqueológicos, históricos y Bienes de Interés Cultural indica que la zona ha estado poblada desde tiempos prehistóricos.


Algunas muestras de este rico y variado patrimonio son:

  • Los abundantes abrigos rocosos con pinturas rupestres.
  • Diversos asentamientos vettones (prerromanos), origen de algunos pueblos, como Cepeda.
  • Las explotaciones mineras romanas de El Cabaco.
  • Los monasterios de la Peña de Francia y Batuecas, así como diferentes construcciones y restos de carácter religioso, militar y civil de prácticamente todos los períodos históricos.

Por otro lado, cuatro pueblos integrados en el espacio protegido han sido declarados Conjunto Histórico - Artístico: La Alberca, Miranda del Castañar, Mogarraz y San Martín del Castañar; conservando el resto de las localidades buenos ejemplos de una arquitectura tradicional exclusiva.


En la comarca se mantienen tradiciones centenarias, destacando tanto el folclore y los festejos tradicionales como las artesanías locales. En el Parque Natural es extraordinaria la concentración de artesanos dedicados a los bordados, orfebrería del oro, trajes típicos, cestería de castaño, madera y cerámica. Hay diferentes museos dedicados a alguna de estas actividades.


En la localidad de La Alberca se encuentra la Casa del Parque (+34 923 415 213), que además de sus funciones como centro de atención al visitante y equipamiento de interpretación ambiental constituye un importante recurso para dinamizar la vida social y cultural de los habitantes de este espacio natural.


La Casa del Parque realiza programas de actividades de educación ambiental mensualmente tanto para la población local como para los visitantes a dicha instalación. También en la Casa del Parque se localiza el centro de Documentación Ambiental donde encontrar información ambiental.


Encontraremos muchos equipamientos ligados al rico patrimonio histórico y etnográfico; de gestión municipal son:

  • Aula arqueológica de Las Batuecas, en La Alberca.
  • Centro de interpretación de la minería romana del oro, Las Cávenes, en El Cabaco.
  • Museo etnográfico Casa de las artesanías, en Mogarraz.
  • Museo de fósiles, al aire libre, en Monsagro.



Cepeda






El Cabaco






El Maíllo






Herguijuela de la Sierra






La Alberca






Las Casas del Conde






Madroñal






Miranda del Castañar






Mogarraz






Monforte de la Sierra






Monsagro






Nava de Francia






San Martín del Castañar






Sequeros






Sotoserrano






Villanueva del Conde





  • ©Junta de Castilla y León.
  • ©Patrimonio Natural de Castilla y León.




Última actualización: 08-06-2021






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